Patricio Alberto Muñoz Álvarez
Abogado
En nuestra ciudad existen ciclistas de talla mundial, si -no exagero- ¡ de talla mundial !
Podría nombrar algunos, pero correría el riesgo de dejar otros fuera de la lista, sin embargo y por darme un gusto les dejaré el nombre de mi querido vecino José Catalán Fuchslocher (quien no conozca sus méritos por favor investigue y se sorprenderá); también recordaré que no hace muchos días se distinguió como hijo ilustre de nuestra ciudad a don Juan Carlos Ríos y resulta que uno de sus tantos méritos fue su ligazón al deporte donde se destaca por haber sido ciclista en su juventud.
Coincidencia o no, muy pronto será una realidad en nuestra comuna una red de ciclo vías que cualquier otra ciudad envidiará; a quien se le haya ocurrido tan maravillosa idea vaya un fuerte abrazo y mi deseo de que siga por ese camino de ideas.
Pese a lo dicho, y aunque mencionarlo implique caer en un lugar común, existen pocos incentivos para que nuestros niños se dediquen al ciclismo.
A mí me gustaría que ello cambie y que partamos desde algo tan simple como el hecho de permitir a nuestros niños en los colegios, llevar sus bicicletas; que clubes de ciclistas reciban el apoyo integral que necesitan, desde la preparación física pasando por la asesoría respecto de la alimentación adecuada, la compra de bicicletas para la competición y el apoyo necesario para los múltiples viajes que deben realizar para participar en competencias. ¿estaré pidiendo mucho?…