Llegar a la mayor cantidad de personas que han sido víctimas de delitos violentos en las cuatro comunas de la provincia del Ranco, es el principal desafío que mantiene el Centro de Apoyo a Víctimas de Delitos de La Unión, institución que funciona al alero del Programa de Apoyo a Víctimas (PAV) que financia la Subsecretaría de Prevención del Delito.
El Centro está emplazado en calle Sargento Aldea N°536 de la capital del Ranco, y cuenta con cinco funcionarios al servicio de las víctimas: una abogada, una psicóloga, una trabajadora social y dos administrativos. El objetivo es evitar la victimización secundaria a través de de una intervención integral en apoyo de los usuarios.
Así lo explica la abogada y coordinadora del Centro de Apoyo a Víctimas de Delitos de La Unión, Katherine Müller, quien sostiene que “la misión del Programa de Apoyo a Víctimas es garantizar el ejercicio de los derechos de las personas víctimas de delitos. Esta garantía es a través de una intervención integral, eficiente y eficaz orientada a dar respuesta a las demandas de los usuarios”.
Y complementa: “En base a ello, el objetivo general del PAV es promover que las personas que han sido víctimas de un delitos, superen las consecuencias negativas de la victimización y no sufran de victimización secundaria. Esto se hace a través de una atención integral de equipos profesionales multidisciplinarios, enfocado en los derechos humanos”.
Junto con subrayar que “entregamos ayuda de manera gratuita y voluntaria en cuanto a los psicológico, lo jurídico y lo social”, la profesional detalló que “nosotros estamos dirigidos a nueve delitos esenciales: homicidio, cuasi delito de homicidio, secuestro, violación, abuso sexual, trata de personas, robos violentos, lesiones graves, y lesiones gravísimas”.
Al año, el Centro de Apoyo a Víctimas de Delitos de La Unión atiende a un promedio de 89 usuarios nuevos. Sin embargo, durante 2022 han alcanzado un promedio de 15 víctimas mensuales.
Victimización secundaria
Katherine Müller profundizó en el concepto de victimización secundaria, sobre lo cual explicó que “es aquella que dice relación con la re experimentación del hecho, como consecuencia directa de la victimización primaria que es el hecho en sí. Está relacionada con un trato inadecuado del sistema, y todo ese conjunto de situaciones que vulneran los derechos de las personas, que causan detrimento, lo que provoca un impacto micro social y comunitario”.
“Hay una sensación de pérdida de tiempo, excesiva burocratización, y en ese sentido lo que buscamos como programa es ayudar y apoyar a las víctimas en el ejercicio de sus derechos. Uno puede ser víctima de victimización secundaria cuando denuncia, cuando constata lesiones, en la misma atención reparatoria, y finalmente en la etapa de juicio. Eso es lo que nosotros como programa buscamos evitar”, agregó la coordinadora.
Finalmente, la abogada expuso que “nosotros invitamos a todas aquellas personas que lamentablemente han sido víctimas de delitos, a concurrir a las dependencias del Centro de Apoyo a Víctimas de La Unión para buscar el restablecimiento de sus derechos”.
