En la sala Región de Los Ríos, la Oficina de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, perteneciente a la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco) de la Municipalidad de Valdivia, dio a conocer el resultado de un diagnóstico participativo, cuya finalidad será convertirse en una carta de navegación para futuras acciones que se desarrollarán en un Plan Local de Infancia.
Específicamente, dicho informe viene a dar cuenta de la realidad desde los discursos de niñas, niños y adolescentes de la comuna de Valdivia. Para ello, se dirigieron una serie de acciones en distintos establecimientos educacionales e instituciones formales tanto de sectores urbanos como rurales del territorio, lo que contribuyó para la obtención de información que permitió la elaboración del diagnóstico.
En este sentido, la coordinadora de la Oficina de Protección de Derechos, Priscila Laulhere, explicó que el propósito de este diagnóstico es describir la realidad de las niñas, niños y adolescentes de la comuna de Valdivia en relación a sus derechos. Para esto se realizaron encuestas, grupos focales -focus group- y actividades diagnósticas con menores desde los 6 a los 17 años de edad, de distintos establecimientos educacionales, fundaciones y ONG. Este instrumento tendrá el impacto de generar políticas y planes comunales en esta materia, que apuesten a la participación y protección de los niños y niñas de Valdivia”.
Cabe destacar, que desde el municipio adelantaron que el futuro Plan Comunal de Infancia se tiene programado iniciar el trabajo durante el segundo semestre de este año y el primero del próximo. Todo dependerá del trabajo conjunto entre los diferentes organismos técnicos que deben participar en esta iniciativa.
Conclusiones y propuestas de acción
En esta línea, el diagnóstico arrojó una serie de conclusiones, donde destacan, por ejemplo, que dentro de los derechos más respetados se encuentran el jugar y descansar; en cambio en la vereda contraria estarían la libertad de expresión y el adultocentrismo. En el ámbito de la salud mental se requeriría una articulación de una red para abordar los problemas; mientras que en lo relativo a la violencia intrafamiliar se concluyó la vulneración de derechos como lo más preponderante.
En cuanto a las propuestas de acción se estableció promover la inclusión en establecimientos educacionales y la comunidad; re sensibilizar a las comunidades educativas en la transición y nombre social de personas trans, así como entregar herramientas para disminuir los problemas asociados en los colegios.
También, apoyar y revalorar a la familia como institución relevante para la protección de niñas, niños y adolescentes para que cuente con más herramientas de crianza; fomentar espacios de convivencia escolar entre estudiantes y docentes; aumentar la oferta programática en recreación; y fomentar medidas de salud mental post pandemia.