Nuri González, presidenta del Centro General de Padres, expresó su profunda preocupación por las repercusiones que este cierre tendría en alumnos, docentes y familias. “Siento que vulneraron los derechos de los niños a seguir en un establecimiento que ellos elijan. Están vulnerando los derechos de los profesores de continuar trabajando. Los van a dejar cesantes”, afirmó.
Para González, la situación es un golpe duro para toda la comunidad. “Es lamentable todo lo que está sucediendo. Nosotros vamos a seguir luchando junto con los profesores, con los apoderados para que nos escuchen y nos den una respuesta”, aseguró.
Gestiones y respuesta del Ministerio de Educación
Por su parte, el director del colegio, Pedro Muñoz, detalló las conversaciones sostenidas con el Ministerio de Educación y la evolución de los hechos. “Hoy día, ambos colegios se encuentran trabajando de forma normal. Sin embargo, la situación principal que está aquejando es que, después de varios meses de gestiones sostenidas con el Ministerio de Educación, tanto a nivel regional como nacional, obtuvimos como respuesta que los colegios, la verdad, no podrían seguir”, explicó.
Muñoz destacó que las primeras respuestas del Ministerio generaron optimismo en la comunidad. “Las conversaciones iniciales con el Ministerio de Educación siempre fueron de la mejor cordialidad, sobre todo en el sentido de que fue el Ministerio de Educación quien nos señaló que los colegios no se cerrarán porque son un aporte a ambas comunas”, indicó.
Sin embargo, la postura del Ministerio cambió abruptamente. “El viernes pasado, se cerraron las posibilidades porque tuvimos una reunión con el equipo en Santiago y nos dijeron que no podían colocar el administrador provisional y que tampoco podían traspasar los colegios al SLEP”, lamentó el director.
Nuri González también enfatizó en la necesidad de buscar soluciones rápidas. “Yo exijo, voy a exigir que el ministro de Educación nos dé una respuesta del por qué jugar con las emociones, con todas las esperanzas que nos dieron”, expresó, agregando que continuará luchando junto a los apoderados y profesores hasta obtener una respuesta satisfactoria.
Incertidumbre para los estudiantes y trabajadores
Uno de los puntos más críticos es el impacto directo en los estudiantes y el cuerpo docente. “Muchos niños quedaron sin colegio porque volvieron acá. Entonces, ellos no van a poder postular ahora a otros colegios porque van a quedar en lista de espera. ¿Qué va a pasar con esos niños?”, cuestionó González.
Por su parte, el director insistió en que la situación requiere un análisis urgente. “Queríamos garantizar que los niños tengan su cierre académico como corresponde, al mismo tiempo que los trabajadores de la educación, ya sean profesores y asistentes, tengan su sueldo y el pago de imposiciones como corresponde de aquí al mes de febrero”, subrayó.
Tanto el director como la presidenta del Centro General de Padres coincidieron en que las autoridades deben actuar con responsabilidad y considerar el impacto social que tendría el cierre del colegio. “El tipo de proyecto educativo también era importante, mantenerlo como una oportunidad de tener distintos escenarios abiertos en las comunas para los apoderados”, concluyó Pedro Muñoz.