Día Internacional de los Bosques y…de la vida que albergan en su interior

Por Dr. Franco Lotito C.
Conferencista, escritor e investigador (PUC)

“Sólo después que el último árbol sea cortado, el último río haya sido contaminado y el último pez haya sido atrapado, sólo entonces nos daremos cuenta que el dinero no se puede comer” (Proverbio nativo americano, 1850).

Cada 21 de marzo se celebra el “Día Internacional de los Bosques” y, al respecto de esta celebración instituida por la Asamblea General de la Naciones Unidas, hay una cosa muy cierta y que no es posible rebatir: una nación que tala y destruye sus bosques de manera absurda, indiscriminada y por un mero beneficio económico sin pensar en el futuro y sin que le importe el grave daño que está causando al medio ambiente y al planeta, lo único que hace es destruirse a sí misma, por cuanto, los bosques representan –literalmente– “los pulmones de nuestro planeta y de la vida que albergan en su interior”.

Los bosques son los encargados de purificar el aire, alimentar y resguardar a todas las miles de especies que viven en su interior, y liberar al planeta Tierra del exceso de contaminación que se produce. Lo peor del grave daño que se hace, es que no tenemos un planeta de repuesto y es el único hogar que hay a disposición.

El objetivo de la Naciones Unidas al instituir esta fecha era simple y con un sentido urgente y muy claro: destacar la importancia de todos los tipos de bosques que existen sobre la Tierra, buscando generar conciencia acerca de la necesidad de cuidarlos, ya que de ellos depende –se quiera aceptar o no– la supervivencia de la humanidad. Toda vez que se celebra este día, lo que se hace es alentar a las distintas naciones para que adopten todas las medidas e iniciativas posibles –ya sea en el plano local, nacional e internacional– para su cuidado. De ahí la importancia que se le da a la preservación de los bosques amazónicos, llamados los “pulmones del mundo”.

En este sentido, las observaciones y advertencias de numerosos científicos y expertos en la materia representan un aviso admonitorio del daño que el ser humano le está haciendo a su medio ambiente, al señalar que aquello que le estamos haciendo a los bosques del mundo, no es sino un simple reflejo de aquello que nos estamos haciendo a nosotros mismos.

Revisemos algunas razones de la importancia de los bosques:

1. “Los bosques y los árboles almacenan carbono y liberan oxígeno a la atmósfera”, lo que sin duda ayuda a mitigar las graves repercusiones de la alta contaminación ambiental y del cambio climático que vive nuestro planeta.

2. Gracias a “insectos como las mariposas y las abejas que permiten la polinización de las flores de los árboles, tenemos una gran diversidad de frutas” que millones de personas utilizan para uso doméstico y sustento diario, así como también para la venta, con el fin de obtener ingresos que les permitan mantener a sus familias.

3. “La madera es una importante fuente de energía renovable”, ya que la dendroenergía, es decir, aquella que proviene de los árboles, le proporciona a los seres humanos más que toda la energía generada en su conjunto por el sol, el agua o el viento. Los cálculos indican que el suministro de energía a través de la madera representa el 45% de total energético: 27% en África, 13% en Latinoamérica y el Caribe y 5% en Asia y Oceanía.

4. “La mitad de la producción mundial de madera se utiliza como fuente de energía para cocinar, calentarse y generar electricidad”, lo anterior significa que gracias a los combustibles que provienen de las masas boscosas alrededor de 2.500 millones de personas en todo el mundo pueden cocinar, hervir agua y calentar sus hogares.

5. De acuerdo con datos suministrados por las Naciones Unidas, la “dendroenergía es un motor de crecimiento económico”, ya que más de 900 millones de personas –principalmente de países en desarrollo¬– se dedican al sector de energía de origen forestal a tiempo parcial o completo, una razón adicional para efectos de cuidar nuestros bosques.

6. Los “árboles contribuyen a una mayor y mejor calidad de vida”, así como también a un considerable ahorro energético en las zonas urbanas, ya que la plantación y distribución estratégica de árboles en zonas urbanas puede enfriar el aire entre 2 y 8 grados centígrados.

7. Las “masas boscosas proporcionan además de aire limpio, mayor cantidad de agua y energía renovable con efecto neutro en cuanto a emisiones de dióxido de carbono”. Por lo tanto, una gestión sustentable de los bosques contribuye a un futuro mucho más saludable y ecológico.

8. Los parques y zonas verdes urbanas, así como los “bosques repartidos por todo un país, posibilitan llevar un estilo de vida activo y saludable”, contribuyendo en el mejoramiento de la salud mental y en la prevención de diversas enfermedades pulmonares, brindando al mismo tiempo un lugar donde las personas pueden divertirse, socializar y descansar.

En función de todo lo anterior, la misión es una sola: ¡cuidar y preservar los bosques y, de paso, cuidar a las miles de especies que viven en su interior!

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