Durante la noche del sábado, de 15:00 a 23:00 horas, se realizaron 1,370 controles en la región, que derivaron en 91 infracciones, marcando un impacto significativo en la lucha contra la criminalidad local.
La estrategia de Carabineros se centró en la desarticulación y neutralización de actos delictivos, con el objetivo de mejorar la seguridad comunitaria.
Esta ronda es parte de una serie de operativos preventivos destinados a reforzar la presencia policial y mejorar la capacidad de respuesta ante delitos flagrantes. A nivel nacional, 271 de los detenidos fueron aprehendidos en flagrancia.